La pintura es un arte que generalmente requiere paciencia, tiempo y
comodidad, tres cosas que los artistas de Pintura Subacuática no disponen
porque si no estarían arriesgando sus vidas. Estos grupos inusual de pintores, que todos son buzos certificados y experimentados, trabajan en profundidades que van de los 2 a los
20 metros para realizar sus aclamadas obras de arte, allí abajo del agua. Y
deben concluirlas en menos de los 40 minutos, el tiempo que dura el oxígeno de
sus tanques.
Los buzos-pintores dicen que pintar en las profundidades es igual que
hacerlo en la superficie. Simplemente colocan un adhesivo especial a sus
lienzos que es resistente al agua y que aplican antes de sumergirse, luego es
sólo elegir bien los tonos, ya que cuando más profundo pinten, más se
distorsionan los colores.
A pesar de decidir en qué fondo quieren trabajar y a que profundidad, los
pintores bajo el agua tienen que tener mucho cuidado cuanto más profundo se
baje los colores se pierden más, y los colores de la superficie tienen un
aspecto totalmente diferente. El rojo, por ejemplo, se vuelve marrón o negro en
el agua.
A mi me encantaría algún día aprender a bucear y poder hacer un cuadro bajo el agua.
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