Comer y beber es uno de los principales placeres que disfruta todo visitante de la feria, todas las casetas y multitud de puestos ambulantes ofertan una amplia gama de manjares que permiten satisfacer el apetito y la sed en cualquier momento.
En la actualidad el número de casetas asciende a 1047, muchos sevillanos tienen casetas propias hacen de ellas como un trozo más de su propia vivienda donde reciben a sus familiares ,amigos... en un ambiente amigable y de relajación, a estas casetas solo se permite la entrada con invitación; a la gente que no tiene donde acudir se les invita a pasar a las casetas de acceso libre.
Los principales platos para comer son el "pescaito frito", el jamón de Jabugo o ibérico, chacinas ibéricas, langostinos de Sanlúcar, los garbanzos con bacalado, la caldereta... como bebida se acompaña con manzanilla, cerveza, refresco o el rebujito.
El traje típico de las mujeres es el traje de flamenca o de gitana, los hombres visten de caballistas vestidos con traje tradicional corto y el sombrero de ala ancha típico de la Baja Anadalucía.
El "coche de caballo" es el único elemento de transporte permitido en el Real de la Feria. Por ser una fiesta de tradición ganadera al mismo tiempo, se celebra paralelamente y desde una semana antes del comienzo de la Feria, el ciclo taurino en la Real Maestranza de Caballería.
Las sevillanas son el cante y baile típico de la Feria de Sevilla.
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